Internet nos sorprende. Publicar un libro era tarea difícil hasta que han llegado portales como Bubok y, cualquier ciudadano, puede hacer realidad su sueño. Es más, también sirve para difundirlo.Yo tenía mi libro de poesías publicado y distribuido entre amigos y conocidos, pero no ha llegado más allá de mis círculos cercanos, porque introducirse en las redes comerciales es difícil. Tan sólo alguna librería de barrio, ha ido vendiéndome algún ejemplar. Y, pienso que si un libro no se lee, no existe. Así que, ahora he tenido la oportunidad de colgarlo, sin precio alguno, en Bubok y, al menos, podrá llegar a más públicos, porque el mundo virtual no tiene fronteras. Animo a todos los que queráis publicar algo, a que lo hagáis. Y, a mis amigos, a que me pidan un ejemplar, porque todavía me sobran ejemplares para regalar.
Adquirir mi libro.
domingo, 20 de septiembre de 2009
sábado, 12 de septiembre de 2009
Las islas griegas
Una amiga mía me ha pedido información sobre las islas griegas. Lo último que yo recomendaría sería hacer un crucero. Yo me iría al Pireo, el puerto de Atenas, al que se llega en metro y me cogería un barco que te acercara a la isla elegida. Si quieres irte sólo un día, elige una cercana, como Hydra (pintoresca y perfectamente saboreable en un día). Si tienes más tiempo, vete a una de las denominadas islas Cícladas (Míconos, Paros, Andros...). En dos o tres días podrás disfrutar de sus calas, sus blancos pueblos, sus amables gentes, sus noches despiertas... Además, tú mismo puedes saltar de una a otra cogiéndote un barco en cualquiera de ellas.
Y para conocer la idílica Santorini es necesario pasar mínimo 2 o 3 días. Respirar tranquilamente el azul turquesa del Mar Egeo, tumbarte en la Red Beach disfrutando de su paisaje volcánico y exótico, contemplar la puesta de sol en la ciudad de Ía (sin un reloj que te recuerde que es la hora de volver al barco), o sumergirte en el ambiente de la noche griega de Fira, su capital; hay rincones que sólo se pueden descubrir si puedes perderte sin prisas y sin un guía que te paute los tiempos.
Tuve la suerte de estar en Santorini cuatro días, recorriéndome todos sus rincones y perdiéndome en lugares no indicados en ninguna guía. Una tarde, sentada en una terraza de Fira, disfrutando del atardecer en compañía de un café Frappé, charlé con un turista español de un crucero y me pareció totalmente agobiante lo que me contaba. En cuatro días, cuatro islas, subiéndote y bajándote del barco para conocer la capital de cada isla y poco más... De hecho él había decidido no hacer la excursión propuesta al bello pueblo de Ía, porque quería pasear tranquilamente por la ciudad, cansado de tanto ir y venir... Pero estaba algo desolado, porque después se había enterado que allí era donde estaban las casitas blancas con cúpulas azules. Yo no quise decirle que, además, se había perdido una de las más bellas puestas de sol de Grecia. Tal vez la de cabo Sounión, donde está enclavado el Templo de Poseidón, pueda competir con este mágico lugar; allí donde Lord Byron dejó grabado su nombre.
Y para conocer la idílica Santorini es necesario pasar mínimo 2 o 3 días. Respirar tranquilamente el azul turquesa del Mar Egeo, tumbarte en la Red Beach disfrutando de su paisaje volcánico y exótico, contemplar la puesta de sol en la ciudad de Ía (sin un reloj que te recuerde que es la hora de volver al barco), o sumergirte en el ambiente de la noche griega de Fira, su capital; hay rincones que sólo se pueden descubrir si puedes perderte sin prisas y sin un guía que te paute los tiempos.
Tuve la suerte de estar en Santorini cuatro días, recorriéndome todos sus rincones y perdiéndome en lugares no indicados en ninguna guía. Una tarde, sentada en una terraza de Fira, disfrutando del atardecer en compañía de un café Frappé, charlé con un turista español de un crucero y me pareció totalmente agobiante lo que me contaba. En cuatro días, cuatro islas, subiéndote y bajándote del barco para conocer la capital de cada isla y poco más... De hecho él había decidido no hacer la excursión propuesta al bello pueblo de Ía, porque quería pasear tranquilamente por la ciudad, cansado de tanto ir y venir... Pero estaba algo desolado, porque después se había enterado que allí era donde estaban las casitas blancas con cúpulas azules. Yo no quise decirle que, además, se había perdido una de las más bellas puestas de sol de Grecia. Tal vez la de cabo Sounión, donde está enclavado el Templo de Poseidón, pueda competir con este mágico lugar; allí donde Lord Byron dejó grabado su nombre.
martes, 8 de septiembre de 2009
Juventud, divino tesoro...
Hoy en el Diario ABC leo un reportaje con el título "Hijo de papá de día, vándalo de noche". Hace referencia a una reyerta ocurrida el domingo 6 de septiembre de 2009 en Pozuelo de Alarcón (Madrid), que dejó "una ciudad destruida, un rastro de veinte detenidos, a diez policías heridos en el asfalto y una pregunta en el aire: ¿Qué está pasando con nuestros menores?". Pregunta que queda en el aire.
Pues yo no sé responder, pero creo que a pesar de los problemas que acechan a los jóvenes de hoy -el consumo de alcohol a edades muy prematuras, el peligro de las drogas de diseño, la violencia callejera...- en la sociedad actual también hay jóvenes que buscan otras maneras de entretenerse -la música, la danza, el deporte...- y también, cada vez más, los que se dedican a proyectos solidarios. Pero lo malo brilla más que lo bueno en los medios de comunicación.
Sí, cierto es que la sociedad no es la misma. Nuestros jóvenes se pasan muchas horas frente al ordenador y la Play -nosotros también-. Sí, educar es difícil y los padres no debemos ser meros consentidores en esta sociedad de consumo. Nuestro papel es fundamental. Debemos enseñarles a que decir "no" -al alcohol, al cigarro, a las drogas...-, es una postura más valiente que dejarse llevar por lo que hacen los demás. Pero reconozco que cuando un adolescente comienza a ir al parque con los amigos, hay ciertas cosas que se nos escapan de las manos. Así que, únete a ellos e intenta compartir alguna de sus aventuras. Si llenas su tiempo libre con actividades sanas, creativas, musicales... quedará mucho menos tiempo libre para los videojuegos y las salidas al parque. Me parece una experiencia muy enriquecedora para los niños las actividades del programa MUSE, promovidas por la Fundación Yehudi Mehudi. Se intenta integrar en las Escuelas Primarias la música, la danza, el teatro... para que los niños expresen su creatividad.
Y, sí, por mucho que hagamos, nuestros hijos algún día nos meterán un "gol". Pero todo no puede ser previsible y son los riesgos por los que nuestros padres también pasaron. ¿O es que todos no hemos sido adolescentes?
Pues yo no sé responder, pero creo que a pesar de los problemas que acechan a los jóvenes de hoy -el consumo de alcohol a edades muy prematuras, el peligro de las drogas de diseño, la violencia callejera...- en la sociedad actual también hay jóvenes que buscan otras maneras de entretenerse -la música, la danza, el deporte...- y también, cada vez más, los que se dedican a proyectos solidarios. Pero lo malo brilla más que lo bueno en los medios de comunicación.
Sí, cierto es que la sociedad no es la misma. Nuestros jóvenes se pasan muchas horas frente al ordenador y la Play -nosotros también-. Sí, educar es difícil y los padres no debemos ser meros consentidores en esta sociedad de consumo. Nuestro papel es fundamental. Debemos enseñarles a que decir "no" -al alcohol, al cigarro, a las drogas...-, es una postura más valiente que dejarse llevar por lo que hacen los demás. Pero reconozco que cuando un adolescente comienza a ir al parque con los amigos, hay ciertas cosas que se nos escapan de las manos. Así que, únete a ellos e intenta compartir alguna de sus aventuras. Si llenas su tiempo libre con actividades sanas, creativas, musicales... quedará mucho menos tiempo libre para los videojuegos y las salidas al parque. Me parece una experiencia muy enriquecedora para los niños las actividades del programa MUSE, promovidas por la Fundación Yehudi Mehudi. Se intenta integrar en las Escuelas Primarias la música, la danza, el teatro... para que los niños expresen su creatividad.
Y, sí, por mucho que hagamos, nuestros hijos algún día nos meterán un "gol". Pero todo no puede ser previsible y son los riesgos por los que nuestros padres también pasaron. ¿O es que todos no hemos sido adolescentes?
viernes, 4 de septiembre de 2009
La generación del 69
He leído un artículo en El País en donde se habla de la llamada crisis de los 40. Algunos expertos aseguran que esto ya ha quedado anticuado, puesto que la esperanza de vida es cada vez mayor. Este reportaje me ha hecho reflexionar y he recordado el encuentro que tuvimos hace varios meses los alumnos de la promoción del 69 del C.P. Menéndez y Pelayo. Me encontré con gente que no había visto desde los 14 años y aunque, lógicamente, el paso del tiempo, nos ha hecho a todos más guapos y más altos, también pude apreciar que todos desprendíamos una enorme vitalidad. Ahora, las redes sociales nos han unido de nuevo y nos encontramos creo en el mejor momento de nuestras vidas, habiendo experimentado las blancos y los negros de las experiencias vividas. Así que me reafirmo al leer el periodico que los 40 no es una edad para pensar en crisis, sino para hacer brillar la mágia que hay en cada uno de nosotros y la fuerza para afrontar cualquier desafío. ¡Si queremos, podemos!
jueves, 3 de septiembre de 2009
Primera condena en Guatemala por el genocidio realizado a indígenas
Estos días he leído en la prensa que en Guatemala se ha dictado la primera condena por desapariciones forzadas cometidas durante la guerra civil que vivió el país entre los años 1960 y 1996 (ver recorte). Para los que no lo sepan, cerca de 250.000 personas, la mayor parte de ellas indígenas, fueron asesinadas durante la guerra civil guatemalteca. Se calcula que 45.000 de ellas fueron forzadas a desaparecer.
Hace unos años tuve ocasión de conocer de cerca la pobreza y la falta de recursos de los indígenas que viven en las aldeas del departamento del Alto Verapaz (la zona más pobre de todo el país), en donde, la Asociación Las Conchas (de Cádiz - España) está realizando un excelente trabajo de cooperación. La cruz de la fotografía está situada en una cumbre y , aunque parece no decir mucho, tiene inscritos los nombres de muchos de los indígenas que murieron durante los años del genocidio. Me impresionaron las palabras de un joven que nos acompañaba y que buscaba los nombres de sus padres. Nunca había estado en este lugar a pesar de que vive a pocos kilómetros de allí. Recordaba vagamente como de pequeño tuvieron que salir corriendo de la aldea y abandonarla por la noche porque los militares venían a quemarla. Nunca más volvió a ver a sus padres. Después de un largo rato, por fin encontró los nombres en una de las placas. Los señaló con una sonrisa en la boca...
Por su sonrisa y por la de muchos otros que siguen recordando a sus familiares y amigos desaparecidos, hoy me he alegrado al leer que ya se está empezando a hacer justicia.
Hace unos años tuve ocasión de conocer de cerca la pobreza y la falta de recursos de los indígenas que viven en las aldeas del departamento del Alto Verapaz (la zona más pobre de todo el país), en donde, la Asociación Las Conchas (de Cádiz - España) está realizando un excelente trabajo de cooperación. La cruz de la fotografía está situada en una cumbre y , aunque parece no decir mucho, tiene inscritos los nombres de muchos de los indígenas que murieron durante los años del genocidio. Me impresionaron las palabras de un joven que nos acompañaba y que buscaba los nombres de sus padres. Nunca había estado en este lugar a pesar de que vive a pocos kilómetros de allí. Recordaba vagamente como de pequeño tuvieron que salir corriendo de la aldea y abandonarla por la noche porque los militares venían a quemarla. Nunca más volvió a ver a sus padres. Después de un largo rato, por fin encontró los nombres en una de las placas. Los señaló con una sonrisa en la boca...
Por su sonrisa y por la de muchos otros que siguen recordando a sus familiares y amigos desaparecidos, hoy me he alegrado al leer que ya se está empezando a hacer justicia.
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